miércoles, 28 de agosto de 2013

Ayerbe - Riglos

24-08-2013
Asomándose al precipicio en bici.
Nos venía a visitar Carol y aunque a ella le hubise gustado hacer una salida por el pirineo, esta otra que propuso Toño de Ayerbe a Riglos, fue una muy buena alternativa por su espectacularidad. Dejamos la furgo en la plaza Aragón de Ayerbe y ya desde aquí, por el camino que lleva a la fuente de la Fontellas, salimos a la carretera de Loarre donde al poco tiempo, cogemos una cabañera que nos llevará hasta Sarsamarcuello. Una pista nos lleva hasta la ermita de S.Miguel y el castillo de Marcuello con su iglesia. Después continuamos hacia el mirador de los buitres, pero lo haremos por la senda de Os Fils para pasar por el mirador del mismo nombre y el del tornillo, hasta llegar ahora sí, al mirador de los buitres. Volvemos, pero esta vez por pista, dirección el castillo de Marcuello para llegar hasta el collado de San Román. De aquí sale la senda que desciende por el barranco de los clérigos y bajo los mallos Fils, para acabar en una pista hasta el mismo pueblos de Loarre y sus espectaculares mallos.
Toño ya en la Cabañera camino de Sarsamarcuello
Antes de coger la última cuesta a Sarsamarcuello
Ya en la pista de Sarsamarcuello al castillo
Pasadas las primeras revueltas, el camino se suaviza.
Llegando al castillo, iglesia de Marcuello y a la ermita de San Miguel
Carol en la senda de Os Fils. En algunos tramos mejor ir andando...
En unos de los salientes de la peña.


Tres amigos.
Después del mirador del tornillo, seguimos la senda hasta el mirador de los buitres.
Carol disfrutando de la vista.
Ya en el mirador de los buitres se ven más cerca los mallos de Riglos y la pista que más tarde ciclaremos.
Antes debemos llegar por esa al collado de Santo Román.
Senda por el barranco de los Clérigos. Hay piedra suelta y en algún tramo hay que bajarse de la bici.
Llegada triunfal a Riglos.

El recorrido volviendo por pistas.

Por cierto: fantásticas las terrazas de "El Puro" en Riglos, con una vista de excepción de los mallos y la del "Bar Pirineos" en Ayerbe, con su florido toldo y su fuente de madera tipo rural zen, aunque si cambiasen la cerveza de barril Heineken por otra de la tierra...


Carol! La proxima por el Pirineo ¿no?

sábado, 3 de agosto de 2013

El Pueyo de Jaca - Ibón de Sabocos (Circular)

Night Divides the Day: The Music of the Doors por George Winston
A la Ripera y al ibón de Sabocos, hacia años que no los visitaba y volver de nuevo pero montado en bici, sabía que me iba a suponer una enorme satisfacción. Aunque ya desde el mismo Pueyo de Jaca  y hasta arriba el día pintaba mal, no se puede pedir más a un 28 de julio con temperatura fresca en la subida y templada en la bajada. A las 9 de la mañana ya estábamos pedaleando desde el Pueyo (1091mts) hasta el cruce de la carretera que sube a Panticosa, y por ella, a coger la pista de la Ripera que se encuentra en unas condiciones excelentes, a pesar de haber llovido la noche anterior. Sin apenas paradas, en 2 horas y cuarto ya estábamos en el cuello de Sabocos (2090mts) junto a la montaña El Verde, donde después de una parada para reponer fuerzas empezamos la bajada tutelados por Champi. 
Bubal a rebosar
Los primeros duros kilómetros dando lazadas a la pista de la Ripera
Llegando al Dedo de Yenefrito
Por el fondo del valle parecía que se cerraba
Jesusín sin perder detalle.

Volviendo la vista hacia el salto de Tendeñera
Bajo el Mallo las Peñas

Abandonamos la pista y ahora por senda toca empujar algún trozo
Llegando al collado
Descanso merecido.
 Primero por los prados hasta el ibón de Sabocos, donde pedalear por su orilla es un capricho, para más tarde alcanzar a las pistas de la estación de esquí de Panticosa y ya desde el fin del telecabina (1900mts), seguir la bajada por las verdes lomas de Petroso hasta la curva de Santa Cruz (1500mts) donde nos sumergiremos por las sendas de un encantador bosque de hayas que nos devuelve de nuevo al Pueyo.
Esperamos a que las nubes levanten un poco
y bajamos hacia el ibón de Sabocos.
Ibón de Sabocos
Interrumpimos la paz de unos guiris.
Tenemos que seguir la senda pero no tan a la orilla
mejor cogerla subiendo un poco por la derecha.
Desde el telecabina tirándonos por las palas de Petroso
Panticosa a nuestros pies.
El bosque encantador
El que hace las fotos cierra el grupo. ¡Gracias por esperar!
Saliendo de la senda a metros del Pueyo.